El 16 de diciembre se celebra en Salamanca la NOCHEVIEJA UNIVERSITARIA. A las 12 de la noche, miles y miles de estudiantes de toda España tomarán en la plaza Mayor de la ciudad una gominola por cada campanada. Antes de 'encerrarnos' a estudiar los exámenes de enero-febrero, queremos celebrar la última gran fiesta del año. Beber, ligar, bailar y todo lo que da de sí la noche salmantina no es incompatible con el compromiso social. Por ello, este año 2010 queremos vender bolsitas de 12 gominolas a 1 €, que irá destinado íntegramente a la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC). Compra las 12 gominolas de la suerte para la Nochevieja Universitaria. Con tu ayuda estarás regalando, a su vez, suerte a todos los enfermos de cáncer. Feliz Año.

viernes, 17 de diciembre de 2010

232 € recaudados para la lucha contra el cáncer

Ayer se vendieron 232 bolsitas de gominolas en la Nochevieja Universitaria de Salamanca. Es decir, hemos recaudado 232 euros, que serán destinados íntegramente a la Asociación Española Contra el Cáncer.

Muchas gracias a todos los que con su aportación contribuyeron a seguir investigando sobre esta enfermedad, a seguir ayudando a enfermos y familiares, a seguir concienciando a la ciudadanía sobre la importancia del tema...

Gracias.

jueves, 16 de diciembre de 2010

Puntos de recogida de las 12 gominolas solidarias

Esta Nochevieja Universitaria 2010 vamos a divertirnos a tope y, además, a colaborar con la lucha contra el cáncer.

¿Cómo? Comprando por 1 EURO la bolsita de las 12 gominolas de las Campanadas. El dinero será donado íntegramente a la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC).

¿Dónde?
Puerta Zamora, (Cafetería Toscano): 21:30 HORAS


Calle Prior, (En la placita, frente a la chupitería): 21:30 HORAS


Calle Rúa Mayor, (En el quiosco): 21:30 HORAS


PODEMOS!

El cáncer NO es sinónimo de muerte


Historias de superación que demuestran que esta enfermedad se cura. El diagnóstico precoz y el apoyo de los seres queridos, claves para seguir adelante.

Apreciar el color del mar, oler unas flores o disfrutar de la compañía de tus seres queridos. Se viven cada día y no se aprecian como es debido. Pero no es así para todos. Hay muchas personas que absorben la vida minuto a minuto al cien por cien. Para ello, por desgracia, han tenido que pasar por el traumático diagnóstico de un cáncer. La superación de la enfermedad hace que todo dé un giro de 180 grados.

Paloma, Encarni, Maricarmen, Francisca, Pascual, Carlos, María, Pepe, Encarna, Pedro y Emilia, no son nombres al azar, son once historias tremendas. Historias de superación de la enfermedad. Porque cáncer no es sinónimo de muerte y ellos están para contarlo.

"Tu escala de valores cambia por completo y en mi caso, estoy viviendo una segunda juventud", afirma Encarni, de 57 años y a la que le diagnosticaron un cáncer de mama con 50. "De todo lo malo siempre se saca lo bueno, quien pasa por esta enfermedad cambia", añade Francisca a la que le diagnosticaron la misma dolencia con 69 años. Ahora tiene 73.

Todos destacan la importancia de la detección precoz y una vez inmersos en la enfermedad, del apoyo de los seres queridos. "Cuando recibí la noticia del cáncer de laringe decidí reunir a toda mi familia para decírselo sin medias tintas y tomé la decisión de que no me quería morir", afirma rotundo Pepe de 63 años y ahora voluntario de la Asociación Española Contra el Cáncer.

"Se necesita tener cerca una cara amiga y poder echar unas risas. Desde el día del diagnóstico se me paró la vida y no quería que a mi familia también se le parase", cuenta María (50 años). Superar los ´bajones´. El día a día para todos se hacía difícil y aunque era natural tener momentos de flaqueza, lo importante era seguir adelante. "Cuando me diagnosticaron un linfoma de Hodgkin a los 20 años fue muy duro pero estuve acompañada por toda mi familia. El cáncer no lo vivo con mucho sufrimiento porque intentaba poner un escudo aunque era realista. Hay que echarle valor a la enfermedad por ti y por los que te quieren", explica contundente Encarna, de 45 años, que junto al linfoma le detectaron en 2004 un cáncer de mama.

"Cuando tienes un cáncer te pasan miles de cosas por la cabeza. Es normal tener ´bajones´, pero lo importante es no quedarse ahí y seguir adelante", afirma Paloma cuyo cáncer de mama superó hace nueve años. "Hay que aceptar las nuevas circunstancias que se te presentan con cualquier tipo de cáncer porque si no lo haces será imposible salir de esa espiral", detalla Carlos, de 53 años y laringectomizado tras un cáncer de laringe.

Aunque el objetivo de superación será siempre el mismo, cada cáncer y cada persona es un mundo diferente. "Era y sigo siendo muy deportista. No fumaba, no bebía, llevaba una vida sana y me detectaron con 40 años un tipo extraño de cáncer de bronquios (adenocarcinoma bronquioloalveolar). Para mí fue un shock tremendo salir un día a trabajar y no volver, realmente es lo que peor he llevado. Aunque tengo momentos de flaqueza porque el miedo siempre está ahí, es necesario confiar ciegamente en el médico y rodearte de aquellos que te quieren", explica Pedro, de 42 años.

Superar el cáncer, mirar hacia el futuro y disfrutar el tiempo, son palabras que toman otras dimensiones para estas personas. "Es un proceso bestial que vas superando poco a poco pero con muchos interrogantes. Por eso, una vez superado vives la vida a otros niveles porque antes vivía muy deprisa y ahora disfruto de cada cosa, cambian mis prioridades y no dejo de hacer cosas para mantener mi cabeza ocupada. Realmente ahora soy feliz", cuenta Emilia tras superar un cáncer de colon.

Pascual, que lleva 24 años laringectomizado, enseña ahora desde la Aecc a utilizar la voz esofágica. "Tras la operación muchos se aislan y no se integran en la sociedad. Pero yo hago mi vida normal, incluso buceo, porque he tenido todo el apoyo de mi familia", destaca Pascual.

"Es necesario transmitir que el cáncer se previene y se cura. La familia te sobreprotege y se queda contigo y eso te ayuda a salir de la enfermedad", añade Maricarmen, que superó el cáncer de mama hace cuatro años.

Once historias de superación que se suman a las personas que superan el cáncer cada año. Porque éste es el triunfo que transmiten: el cáncer se puede curar.

Extraído de "La Opinión de Málaga"

lunes, 13 de diciembre de 2010

"La Tercera Guerra Mundial: la guerra contra el cáncer"



El cáncer es la segunda causa más frecuente de mortalidad infantil en niños con edades comprendidas entre 1 y 14 años. Las estadísticas enseñan que cada año más de 160 mil niños son diagnosticados con cáncer en el mundo. El 80% de los pacientes infantiles viven en países en desarrollo.

Ante estos datos, sólo nos queda unirnos y combatir. Es cierto que nuestro enemigo tiene la fuerza; pero nosotros tenemos la razón. No perdamos el tiempo en lamentaciones; no perdamos el tiempo en buscar culpables donde no los hay; no perdamos el tiempo... Cada minuto cuenta, y esta guerra no da tregua.

Colaboremos todos para ganar la guerra al cáncer. No son armas lo que necesitamos, sino ciencia. No son amenazas, sino investigación. En la actualidad, cientos y cientos de especialistas trabajan día a día en España para buscar una cura generalizada a esta enfermedad; cientos y cientos de personas de personas trabajan en la aplicación de terapias de tratamiento contra el cáncer. Miles de hombres, mujeres y niños padecen cáncer. Tienen miedo a lo desconocido, al dolor, a la muerte. Y con ellos, sus familiares, sus amigos, sus vecinos... ¿Y si la siguiente persona a la que detectan cáncer tiene nuestro nombre y apellidos?,¿qué nos gustaría que pasara?

La Asociación Española Contra el Cáncer invierte en investigación, en tratamiento, en ayuda a los enfermos y sus familias, en labores de concienciación social... Gracias a donaciones como la tuya, de sólo 1 euro, contribuyes a que todo el proyecto contra el cáncer siga en marcha y consigamos cada vez más curar el cáncer y garantizar unas buenas condiciones de vida para quienes pasan o han pasado por él.

Sé un soldado en nuestro ejército. Sin duda, nuestro bando ganará esta guerra. Sin duda, ganaremos.

Uno de cada tres hombres pacederá cáncer a lo largo de su vida